Alimentación y nutrición: diferencias

Aunque pareciera que alimentación y nutrición pueden significar lo mismo, y en muchas ocasiones ambas palabras son tomadas como sinónimo, tienes que saber que no es así.

La alimentación se refiere a cualquier acto que implique comer cuando se presenta hambre, cuando existen síntomas de ansiedad y estrés o por placer .

Ahora bien, hablemos de los alimentos. Aquellos procesados mediante la industria generalmente son los que pueden hacer daño al organismo por su contenido de grasas saturadas y conservantes y son popularmente conocidos como “comida chatarra o rápida”; entre las más populares: hamburguesas, perros calientes, frituras y golosinas. Curiosamente, este tipo de comida es la que tiende a consumirse durante episodios de ansiedad, estrés o solo por gusto.

La selección del tipo de alimentos depende de diversos factores, como los hábitos y rutinas de una persona (sedentaria o activa), por lo que en ocasiones mantener una dieta saludable y nutrida resulta complejo.

Nutrirse a través de la comida

La nutrición es el conjunto de procesos biológicos que ocurren en nuestro organismo cuando nos alimentamos y, a través de la comida, extraemos, procesamos y utilizamos los nutrientes para obtener la energía necesaria para mantener la salud y la vitalidad. De allí el cuerpo es capaz de absorber elementos importantes para su funcionamiento y desarrollo óptimo como lo son las grasas (Omega-3, aguacate), carbohidratos (hortalizas, verduras y frutas), proteínas (carne, pollo, lácteos, huevo), vitaminas (A, B, C) y minerales (potasio, hierro, magnesio) obtenidos de manera saludable a través de comidas de origen vegetal o animal no procesadas.

Entonces, si la nutrición depende de la alimentación, ¿también quiere decir que la nutrición será mejor dependiendo de los alimentos que consumas?

La respuesta es sí, si te alimentas de manera balanceada tendrás una nutrición completa que incluye macronutrientes y micronutrientes. En contraste, si lo único que consumes son alimentos procesados, con grasas saturadas, conservantes químicos altos en sodio, no lograrás nutrir bien a tu cuerpo y por ende tampoco gozar de una buena salud, puesto que es común que se presenten problemas de sobrepeso, cardiacos, de circulación, anemia, diabetes y más.

Diferencia clave: Nutrición vs. Alimentación

La diferencia fundamental es que la alimentación es un proceso voluntario, variable y consciente que consiste en la elección, preparación e ingestión de los alimentos, por lo que depende de nuestras costumbres, modas y/o deseos de cada momento. La nutrición, en cambio, es un proceso involuntario e inconsciente mediante el cual el organismo incorpora, transforma y utiliza los nutrientes contenidos en los alimentos escogidos.

Aunque son procesos distintos, es importante dejar claro que uno (nutrición) depende del otro (alimentación balanceada), por lo que es vital crear hábitos saludables a la hora de comer para garantizar que tu organismo está recibiendo los recursos que necesita para funcionar, crecer y reaccionar ante agentes no deseados como virus y bacterias malignas.

¡No pierdas el ánimo! Una dieta saludable no debe ser aburrida ni debe significar estar hambriento todo el tiempo, más bien se trata de un equilibrio en la cantidad y tipos de alimentos que ingieres para lograr el balance perfecto, verte mejor y sentirte mejor por dentro y por fuera.

¡Cuida tu alimentación para cuidar de ti #SinSacrificios!

Si quieres saber estrategias sobre cómo nutrirte de manera correcta, no esperes más e inscríbete en el programa de entrenamiento para hábitos saludables: Desafío 21DETOX, de Nutrisonia.